Ir al contenido principal

Viajando a Montevideo: entradas, pasajes, alojamiento y Paul McCartney


Entrada para cancha en Montevideo de la Gira Out There de Paul McCartney, 2014


Este fue un viaje impensado. Practicamente veníamos volviendo del viaje de Jujuy, Salta y San Pedro de Atacama y nos enteramos que el mítico Paul McCartney tocaba en Montevideo el sábado 19 de abril en la primera fecha sudamericana de su gira Out There....No dudamos mucho y decidimos comprar online las entradas para el concierto....todo fácil y expedito....pero faltaba asegurar alojamiento y pasajes. Primero decidimos ver lo del alojamiento y pese a que faltaba un mes antes del concierto, casi todo estaba agotado para esas fechas. Claro, era fin de semana santo en toda Sudamérica y paralelamente era en Uruguay la Semana del Turismo que coincide con Semana Santa, pero con la particularidad que es un feriado que dura los 7 dias de esa semana, lo cual explicaría que buena parte de las habitaciones en Montevideo colapsaran con anticipación....teníamos las entradas, así que había que buscar como sea un lugar donde dormir. Entramos en Hostelbookers, vimos un hotel (el Splendido) que ofrecía un cuarto compartido por 600 ARS por dos noches....ya dijimos, esta es la nuestra, así que lo reservamos por Hostelbookers, con el recargo que implica una reserva en este sistema. Todo bien, nos fuimos a acostar y al día siguiente, no recibimos el correo de confirmación del alojamiento por el contrario, recibimos un correo que planteaba todo lo contrario: la reserva no se pudo hacer válida pero Hostelbookers nos cagó con 7 dólares...ya que es sólo intermediario y cobra uses o no uses la reserva....

Los del hotel nos "compensaron" con un miserable descuento de 8 dólares para una próxima visita a Montevideo....pero no era consuelo ya que de un paraguazo habíamos perdido el alojamiento. Así que vuelta a buscar, aunque sea un Hostel, encontramos uno por el centro (12,5 dólares por cama x día) perteneciente a Hostelling International y bueee... no nos daba buena espina por experiencias pasadas en hostels sudamericanos, pero era lo que había y lo tomamos. Solucionado por ahora lo del alojamiento, vemos en que viajábamos...teníamos que viajar desde Buenos Aires a Montevideo, así que las opciones eran el ferry hasta Colonia + micro (bus) a Montevideo, avión o micro (bus). En el caso del ferry, Buquebus descartado por sus precios, Seacat (hermana menor de Buquebus) tenía pasajes de ida pero no de vuelta, Colonia Express, lo mismo, Cacciola no hace el transbordeo a Montevideo desde Carmelo...los aviones, un robo a mano armada (y amplificado por el 35% de la insufrible AFIP) así que terminamos viajando en micro, pese al 35% de ida (el pasaje de vuelta aunque se compre en Argentina, no se recarga con 35%) así que compramos online en el sitio de Condor Estrella...en las inefables 3 cuotas sin interés que aún perviven pese a la inflación.

Pasaron los días y llegó el día para partir. Salíamos de la Terminal de Retiro el jueves 17 (jueves santo) a las 22:30. Tras viajar en el cada vez más abandonado a su suerte Subte, llegamos a un casi vacío Retiro (el flujo fuerte de salidas había sido el día anterior) a recofirmar el pasaje (por ser boleto electrónico) en la boletería de Condor Estrella, donde el que atendía  le colocó un timbre cual documento escolar. Luego había que ir a la zona de embarque internacional, que se encuentra al otro lado de la Terminal de Retiro, donde había que pasar el control de la Policía de Seguridad Aeroportuaria.....el colmo de la paranoia ya que el sentido de esta revisión (no hay un control migratorio, lo cual justificaría la existencia del rayo x) es para ver si los viajeros sacan divisas de la Argentina.....otro síntoma de que la situación financiera es más manejada por la paranoía que por decisiones acertadas, pero bueno, eso es otra historia..

Sala de espera internacional, Terminal de Retiro, 2014

Pasamos por el rayo X y tuvimos que hacer la espera en una sala abandonada, sucia y desprolija, junto a las plataformas (andenes de salida). Por suerte el tiempo pasó rápido, llegando el micro (bus) a la hora, subimos los equipajes y ya, estábamos viajando a Montevideo. El bus en que viajábamos  era un bus cama con servicio (cena fria: milanesa de pollo con ensalada y brownie), por suerte cómodo. Lo que rompió la monotonía del viaje, era un pintoresco brasileño mayor de 60 años que se autodenominaba "Don Brasil" dado que su nombre era complicado de decir...este Don Brasil iba con una mujer que pensábamos era su esposa, pero luego, durante el viaje, vimos a Don Brasil en acción: había dos mujeres mayores de 50 años, una dominicana y una uruguaya, con las que fue conversando todo el viaje, usando toda su simpatía para saber prácticamente toda su vida (de donde eran, que hacían, si eran solteras, de que vivían, donde vivían) sin revelar mucho sobre el, pero si de su viaje (venían desde Bariloche en bus), que era residente de  São Paulo y que con la mujer con la que viajaba "solo era una amiga"....pero para ser una amiga, se fue con una cara de orto (o pocker) todo el viaje....

Tras 4 horas de viaje, llegamos a la frontera, (el bus cruza por el Río Uruguay entre Gualeguaychú y Fray Bentos) estando la salida de Argentina y entrada a Uruguay. A diferencia de otros cruces fronterizos argentinos, el agente migratorio uruguayo sube al bus, pide documentos para corroborar el listado de pasajeros y ya, era eso. Antes de subir, subió un uruguayo, que tenía aspecto de burócrata pero no, era cambista "con un cambio mejor que en el banco"....2,10 $U por peso argentino...aprovechamos de cambiar algo y seguimos viaje. Luego de 4 horas más, llegamos a la terminal de Tres Cruces, en Montevideo, donde nos esperaban algunas sorpresas y no solamente Paul McCartney.


Comentarios