Ciudad de México: caminando por el Centro Histórico y la Alameda Central

Ya estábamos en la Ciudad de México

Tras desayunar fuerte por segunda vez en El Popular, aprovechamos de caminar por el Centro Histórico. 

Era domingo y temprano, pero ya había bastante gente en la calle. 

A diferencia de Santiago o Buenos Aires, en Ciudad de México la gente va a pasear al Centro Histórico en cantidades industriales el día domingo y el comercio se encuentra abierto en su mayoría, salvo los bancos. 

Varias calles del Centro Histórico se han convertido en peatonales como Madero, lo que hace bastante más notoria la enorme cantidad de gente que anda en un día domingo. Como muchos ya sabrán, quien escribe vivió en México varios años (y algunos meses en la Ciudad de México) así que esta última escala del viaje a Japón, fue bastante más emocional que otra cosa. 

 Así caminamos sin mayor apuro por la calle Madero hasta llegar a las faldas de la Torre Latinoamericana, esa especie de Empire State chilango que se yergue sobre el eje Central y Madero. A sus pies se encuentran exposiciones y obras de arte que van cambiando cada cierto tiempo y por lo general gratuitas.

Exposición a los pies de la Torre Latinoamericana, Ciudad de México

Luego de estar un rato mirando las estatuas, salimos de ahí y cruzamos el Eje Central. Allí nos topamos con otro clásico de los domingos en la Ciudad de México: el Palacio de Bellas Artes. 

No sólo es la ópera y principal museo del arte de la ciudad, sino que también es uno de los puntos de reunión imperdibles para juntarse con gente en esta metrópolis (junto con juntarse debajo de los relojes de las estaciones del metro).  

El Palacio de Bellas Artes, no sólo cumple con su función cultural sino que también es un faro dentro de la marea humana que es esta ciudad. Siempre estará lleno de gente, tanto para ir al museo como para encontrarse con alguien.

Palacio de Bellas Artes, Ciudad de México

Luego de pizpear un rato en la librería que se encuentra enfrente del Palacio de Bellas Artes, decidimos seguir por la Avenida Júarez, la cual los días domingo se transforma en una gran vía libre para peatones y bicicletas.

Esto  es aprovechado por gente de todas las edades, además de poder caminar por una de las grandes avenidas de la capital de México sin temor de que los automóviles y los peseros (colectivos/micros) te pasen por encima.

Eje Central visto desde la Avenida Júarez

Seguimos caminando por la Avenida Júarez, bordeando la Alameda Central, ese parque pensado para  gozo de los ricachones del periódo porfirista (1880-1910) pero que tras la revolución mexicana se convirtió en el gran lugar de reunión de los inmigrantes de las zonas rurales hasta el día de hoy. 

Acá pudimos ver una foto extraña para un domingo al medio día: una avenida Júarez casi vacía de bicicletas.

Alameda Central, Avenida Júarez y la Torre Latinoamericana en domingo

El día recién comenzaba y seguiríamos caminando por el centro histórico de la Ciudad de México, pero lo que sigue ya es otra historia.

Tips de Viaje:

La Torre Latinoamericana no sólo es un enorme rascacielo que rompe con el paisaje del centro Histórico de la Ciudad de México, es además un centro cultural con cafés, museos y un mirador donde puedes ver la ciudad cuando la contaminación lo permite. Más info en http://torrelatinoamericana.com.mx/

El Palacio de Bellas Artes además de tener salas para exposiciones de obras y calendario de presentaciones musicales, también posee cafés, restoranes y tiendas. Si vas a recorrer el museo, se recomienda dejar las cosas en guardarropia. Más info en https://palacio.bellasartes.gob.mx/