Oficialmente me iba a quedar 4 días, pero a larga me quedé 9 días acá.
¿Porque? Ni yo mismo me quedó claro porqué me quedé tantos días. ¿Le echo la culpa a Río? Creo que será lo mejor.
Había llegado de mi largo vuelo desde Iquique, cerca de las 16 horas.
Como no había dormido mucho, andaba como zombi, así que saliendo desde el sector de llegadas del Terminal 2 del aeropuerto Galeão, me decido tomar un Uber, ya que a diferencia de Guarulhos, salir de Galeão no es tan fácil con transporte público.
Busco en Uber y me dirijo hacia el terminal de Uber que esta al final de la Terminal 2, a la altura del sector de llegadas. Me subo al mismo y tras mas de 45 minutos de viaje por el loco transito carioca, llego a mi destino que es en Copacabana. Voy al hostel donde me iba a quedar esos 4 dias (habitación privada) pero al llegar, me dicen que no hay espacio y me mandan a un departamento en calle Santa Clara. Sali ganando, un departamento por 4 dias con cocina, internet y tv, pero bueno, estaba tan reventado que llegué a medio dormitar.
Ya de noche, salgo a dar una vuelta por la playa en Copacabana, la cual tenía 2 ondas, una la de los puestos de comida y tragos en las veredas (aceras) y otra paralela con la gente haciendo deportes en la playa.
Era un total contraste entre lo que ocurría en la calle y lo que pasaba en la playa, parecían 2 mundos inconexos, pero Copacabana es así, siempre.
Pero mucha vuelta no me dí, ya que como andaba con el sueño atrasadísimo, dejo la playa y literalmente me voy a dormir hasta el otro día. Claramente ya no tengo 25 años y las trasnochadas (aunque sean sin alcohol) pasan la cuenta, jajaja.
![]() |
El lunes decido ir al centro en el metro de Río (en portugués brasileño: MetrôRio). Pero no es llegar y comprar pasaje. No, a simple vista es bastante complejo y enredado, pensado sólo para locales, ya que involucra hacerse cuentas y vincular medios de pago como tarjetas de crédito o PIX. También puedes pagar con el teléfono con NFC con Visa y MasterCard (necesario descargarse Google o Apple pay).
Pero si eres de los que no quiere sacar el teléfono, vas a estar varios días y buscas un medio de pago que no sólo te sirva para pagar el metro, sino que también para los buses urbanos (micros,camiones o bondis) y el tranvía que circula por el casco viejo de la ciudad, te va a convenir mucho mejor tener la RioCard.
Pero no la venden en todos lados, sino que debes ir a una oficina de atención al cliente para comprar una tarjeta recargable. Por suerte el proceso es rápido (al menos en la estación Siquiera Campos en Copacabana) y sales con la dichosa tarjeta, la cual puedes recargar en máquinas de autoservicio de cualquier estación del metro carioca.
En la misma estación Siqueira Campos, tomé en dirección al centro, viajando hasta la estación Presidente Vargas, ya que quería conocer el Real Gabinete Português de Leitura (en castellano: Real Gabinete Portugués de Lectura) una biblioteca de estilo medieval incrustada a pocos pasos de la Saara, en el casco histórico de Río. Pensé, es un lugar tranquilo para visitar: estaba en un craso error, estaba lleno de gente.
¿Tan popular es el Real Gabinete Português de Leitura? Lo más probable es que debió haberse convertido en algo instagrameable o tiktokqueable, cosa que comprobé a los pocos minutos. Filmé algo, saqué unas fotos y seguí mi camino.
Traté de ir a la Confeitaria (Confitería) Colombo, un clásico café, tipo Tortoni, que está a pocas cuadras del Real Gabinete Português de Leitura. Cuando llego, había una fila larga y no, no tenía ganas de hacer fila con personas que iban a sacarse selfies en el café. Andaba odioso, lo se. Me dije al salir de la fila de la Confeitaria Colombo, vengo otro día
¿Porqué? Porque ya andaba en mi cabeza quedarme unos días más en Río, pero no en Copacabana, el cual está bien como barrio turístico, pero no es barato para alojar. Así que buscando me decidí quedarme en Catete, un barrio de clase media entre Botafogo y Gloria/Lapa, con estaciones de metro y lo que me era mas interesante, hoteles, supermercados y restoranes algo más baratos. Quería conocer algo menos turístico y más real de Rio de Janeiro.
El día martes, me cambio de alojamiento, dejo el departamento en Copacabana por una pieza de hotel en Catete. Me iba a quedar en el Hotel Vitoria, una opción con las 3 b (bueno, bonito y barato), nada lujoso, pero funcional, seguro y tranquilo, básicamente con viajeros brasileños.
Luego de instalarme, me voy a dar una vuelta por la Playa de Flamengo, la cual es linda pero tiene el problema de estar muy contaminada tanto en el agua como en la playa, una lastima ya que el entorno de estar situado entre medio de la bahía de Guanabara, entre el Pão de Açúcar (Pan de Azucar) y el Aeropuerto Santos Dumont, le da una perspectiva única.
Luego de ir a la playa, me voy caminando a Lapa, la cual no está lejos y había que moverse un poco para bajar el almuerzo, para toparme con la ultraturística escadaria Selarón (escalera Selarón), la cual no andaba hacía años y después me dí una vuelta por Lapa, barrio bohemio que estaba durmiendo su descanso antes que despierte de noche con sus bares, botecos (bar propio de Río de Janeiro) y similares abiertos.
El Miércoles voy al centro a cambiar algo de dinero. Muchas de las casas de cambio en Río de Janeiro están por la zona de la Avenida Río Branco y sus alrededores) ahí es cosa de caminar y buscar un cambio (en este caso, de dólar a real) que fuera conveniente. Luego de cambiar dinero en Casa Aliança (Rua Miguel Couto 35-B), decido darle otra oportunidad a la Confeitaria Colombo. La fila ahora es mejor, avanza rápido y como sospechaba, muchos vienen a buscar la selfie.
En mi caso, más que selfie, quería sentarme y mirar, además de tomar un café. ¿Es caro? No. Para nada el café y las comidas son accesibles para plan turista. Después voy para la zona de la estación del metro Carioca que es desde donde sale el Bondinho (el tranvía que va por los arcos de Lapa hacia Santa Teresa). Llego y veo que hay una espera de casi 2 horas. Ni loco me quedo.
El jueves, decido ir a la Rodoviaria Novo Río, tanto para conocerla como para comprar pasajes para seguir viaje el próximo domingo, ya que el próximo destino iba a ser São Paulo, comenzando la etapa final del viaje.
Hacía mucho tiempo que no andaba por la Rodoviaria Novo Río, años. Llegue, veo precios (los mismos que en la web) y decido viajar por 1001, que tenía un horario decente -cerca del mediodía- para ir a la urbe Paulista. El resto del día, me quedé en Catete, ya que me instalé en un café para trabajar un rato, ya que el internet del hotel estaba caído. Problemático, pero bueno, en todo caso, el internet en los hoteles en Brasil y al menos en Río siempre ha sido malo. Nada de que me pudiera sorprender.
El viernes comenzaba el fin de semana, pero ya es otra historia.
Comentarios
Publicar un comentario
Aprovecha de escribir tus opiniones e inquietudes.
La política de comentarios que se maneja en Directorio de Micros puedes consultarla acá:
https://www.directoriodemicros.com/p/politica-de-privacidad.html