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En camino a la ciudad rosa de Jaipur


Alrededor de la ciudad rosa (pink city) de Jaipur




Ya estábamos en Jaipur. Apenas la conocíamos. Pero nosotros estábamos más enfocados para bien o mal para recuperar nuestro equipaje retenido (ver posteo anterior) así que nos levantamos a primera hora para desayunar e ir al aeropuerto para ver lo del equipaje, ya que no nos contestaban nuestras llamadas ni mucho menos nuestros correos electrónicos.

Llegamos ahí (tuk tuk 350 Rupias) y tras insistir de manera clara (hasta la policía local no les pidió que nos tomaran en cuenta ya que el desaire era evidente) que nos atendieran los de la línea aérea, nos habla el encargado en el aeropuerto de Jaipur un tal mister Amid (o al menos así se presentó), el cual nos dice que el bolso retenido será dejado en nuestro hotel durante las horas de la tarde. Pero no íbamos a dejar que todo esto nos tuviera mal, nos fuimos del aeropuerto algo más relajados así que tomamos uno de los tuk tuk que están organizados en cooperativa apenas se sale del salida del aeropuerto, nos cobró 250 Rupias hasta la ciudad vieja. Nos subimos a este desvencijado mototaxi por varios kilómetros por largas avenidas llenas de universidades, escuelas e institutos (incluso para ser artista de Bollywood) que te muestran a ojo visitante que no todo es turismo acá, hasta que llegamos a una zona llena de tiendas y mercados, donde nos dejó el tuk tuk.






Nos bajamos y ya estábamos en la zona de los bazares de la ciudad vieja, exactamente en la Ajmer Gate (puerta de Ajmer) muy cerca de la llamada pink city de Jaipur o ciudad rosa,  el cual es un color dado por el pintado de sus edificios, el cual es de un color rosado acorde al desierto que rodea a la ciudad teniendo esa pintura uniforme por varias cuadras alrededor. A primera vista se ve  bastante menos caótico que Paharganj en Nueva Delhi, tal vez por el hecho de que esta parte de la ciudad es Patrimonio de la Humanidad por parte de la Unesco, lo que obliga a que esta parte de Jaipur sea mucho más armónica y ordenada que el resto de la urbe.





Comenzamos a caminar por la zona de los bazares, exactamente por la Kishanpore Bazar road (calle del Bazar Kishanpore) la cual es una ciudad mucho más ordenada en el tráfico urbano, esto último no significa que no haya que estar al cruzar atento de las motos, bicicletas, tuk tuks y cualquier cosa con 2 o 4 ruedas o patas lo que permite caminar sin mayor apuro salvo de los que te quieren vender todo, lo cual es un clásico en India o en cualquier lugar con mucho comercio por el turismo. Recorrimos sin mayor prisa donde veíamos una ciudad viva, vibrante, con su ritmo propio y con muchos submundos más allá de lo que te muestran los folletos y las guías de viajes: librerías para estudiantes, farmacias y toda clase de tiendas varias que evidentemente están y viven ajenas a la rutina del viajero, además de como puedes ver en la siguiente foto, puedes toparte con pequeños santuarios para los creyentes del hinduismo.






Seguimos caminando por la Kishanpore road hasta llegar a la calle del Aatish Market, en el Bazar Tripolia, en los bordes de la ciudad rosa. Nosotros acá aplicamos lo que siempre hacemos en cualquier ciudad, caminar casi intuitivamente viendo lo que nos interesa y acá por esta parte (que son los límites de la Ciudad Rosa) se nos hizo bastante llamativa, ya que denotaba la existencia de una ciudad escondida al otro lado de las pequeñas puertas que separan a la Pink City del resto de Jaipur.







Como que no quería la cosa, en nuestro recorrido sin mayor apuro terminamos llegando hasta la Puerta Tripolia (Tripolia Gate) y cruzando esta vieja puerta, que la puerta de entrada a la Ciudad Rosa, la llamada Pink City en si misma, nos toparíamos con las hordas de turistas de paquete turístico, tanto occidentales, chinos y mucho turismo interno, lo cual no debiera llamar la atención dado que India es un país de 1400 millones de personas, además de ser en tamaño un verdadero continente, existiendo también sectores medios y acomodados que buscan días de descanso y salir de la rutina al igual que los occidentales y  también los taxistas y chóferes de mototaxi esperando a la salida para ganarse algunas rupias del turismo.







Tips de viaje:

Moverse en vehículo en los alrededores de la Pink City al momento de viajar era un caos por las obras del metro de Jaipur el cual tiene sólo 9 estaciones en funcionamiento pero se espera que en los próximos años se amplié de manera importante. Si vas a tomar Tuk tuk desde la zona de la estación de trenes de Jaipur no debiera costar más de 100 a 120 Rupias 1 a 2 personas. Si vienes desde el Aeropuerto, desde 350 Rupias es un precio más que razonable. Siempre aclarar cuantos viajan en el taxi o tuktuk para evitar sorpresas desagradables.

Artesanías se pueden encontrar a buen precio cerca de la Pink City, pero regatear siempre es regla acá. Ojo que muchos comerciantes hablan bastante bien castellano.

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