Otra noche de Cierres de Carnaval en Tilcara

Cierre de Carnaval por el centro de Tilcara, 2022

Volvimos de Purmamarca y todavía Tilcara seguía envuelta en los festejos del Carnaval, en este caso de sus cierres.

Ya era nuestra segunda noche en Tilcara, era viernes y hacía 2 días que oficialmente había terminado el feriado, pero este seguía vivo en sus festejos de los Cierres de Carnaval

No olvidemos que esta serie de rituales y festejos, más allá de la curiosidad que generan en turistas y vistantes,  son los que marcan el calendario de la comunidad tilcareña, más allá de lo que diga el calendario oficial y eclesiástico o lo que pensemos nosotros, bichos de ciudad.

Tal vez, ese sea el encanto  de estar en Tilcara durante estos días y justifica plenamente en esta temporada, el tener que pagar algo de sobreprecios en alojamientos,  que muy pocos negocios que quisieran aceptar la tarjeta prepaga del programa previaje y que todo esté lleno de gente, pero estando allá eso no importa mucho.   

Era cosa de aprovechar la estadía al máximo y bueno, en eso estuvimos los días que estuvimos en Tilcara.

Con respecto a las comparsas que nos tocó ver hoy por las calles del centro tilcareño, era simplemente cosa de mirar, observar y si se daba la oportunidad, de seguir a la comparsa por algunas calles y empaparse del ambiente carnavalero, el cual aunque no lo pareciera, ya estaba en sus últimos compases. 

👉👉Para que puedas sentir en el ambiente que había en esos momentos en Tilcara te dejamos este video 

Puede ser que ese sea el  verdadero sentido del carnaval, el poder mantenerse contentos aunque sepas que las cosas no andan bien, algo que para quien viene de un país sin festejos de carnaval como quien escribe,  te desconcierta por un rato pero tiene su lógica. 

Pero más allá de devaneos, era cosa de disfrutar el momento y eso hicimos en nuestro paso por Tilcara.

Curiosos y locales bailando, Tilcara, 2022

Al final encontramos cupo para una excursión por el día a Iruya, un lugar que al menos quien escribe lo tenía pendiente, pero ya es otra historia.